Si bien al finalizar un año comenzamos a pensar en el año
siguiente, muy pocos lo hacen con la seriedad debida y otros menos se ponen
metas para el año siguiente. Pues así comenzó – para la gran mayoría este 2014
que ya está por terminar. Para algunos fue un año de retos, desafíos, cambios;
para otros un año de aprendizajes, experiencias y de exploración. Para mí, lo
resumo en una sola palabra: AVENTURA!
En este blog y en un artículo que escribí para
Inspirulina.com a principios del año, comentaba que al inicio del #2014 todos
teníamos 365 días por delante. Días, en
aquel momento todavía en blanco, los cuales podríamos llenar con realmente lo
que quisiéramos: nuevas ideas, pensamientos,
empresas, trabajos, estudios; en fin, todo nuevo. Para algunos fue una
combinación de todo eso y algo más, como por ejemplo escribir nuestras palabras
e ideas, o llevar a cabo nuevas acciones, metas o actividades. Esos días los
llenaríamos con las experiencias vividas con nuestros familiares, amigos y
colegas del trabajo o la universidad. Y serían días buenos, no tan buenos o
realmente excelentes (nunca días malos como dijo Zig Ziglar).
Pues para algunos este ha sido un año tranquilo o normal. Para
otros sé que fue un año realmente difícil, sobre todo en lo personal. Para ustedes
mi gran abrazo de solidaridad y aprecio. Para unos pocos, como alguien me dijo
hace pocas semanas, el año fue más o menos lo mismo; sin embargo mi comentario
fue que era lo mismo pero diferente, dadas las vivencias que todos hemos tenido
en estos últimos 12 meses.
Para la mayoría,
estoy seguro que éste ha sido un año de Aventuras. Como trato de hacer en
ocasiones, busqué la definición de Aventura y el diccionario de la Real
Academia Española define ‘Aventura’ como:
1.
Acaecimiento, suceso o lance extraño;
2.
Casualidad, contingencia;
3.
Resultado incierto o que presenta riesgos.
Pues si una aventura es un suceso extraño, que puede ocurrir
por casualidad (algo que ya hoy dicen que no existe) y que presenta resultados
algo riesgosos, pues de verdad podemos decir que el 2014 fue un año de
Aventuras: un año de cambios y de retos; un año donde el tener una actitud
personal ha debido ser la bandera en todo lo que hacemos; un año lleno de
motivación personal ya que si bien hay pocos que nos motivan a nosotros,
nuestra obligación es siempre motivar a los demás para lo cual debemos siempre
estar muy motivados. En alguna ocasión hicimos trabajo en equipo; este año pude
definir a los mejores equipos como ‘equipos
altamente motivados’.
Y en una semana nos preparamos a recibir el 2015, más lleno
de todo, con más fuerza, con más emociones y por supuesto con más cambios que
se avecinan. ¿Un año difícil? Yo diría, como me dijeron mis hijos, un año “diferente
o extraño”. Y así debemos ver nuestro futuro, diferente al pasado y mejor que
el presente. Nadie sabe lo que el futuro
nos depara; solo sabemos que sí está en nuestras manos definir lo que vamos a
hacer con él y en él. Nuestras
decisiones nos guiarán el camino y el rumbo que tomemos será el resultado de
nuestras acciones.
Que en este nuevo 2015, lleno de retos pero también de
esperanzas; de cambios y decisiones que definirán nuestro rumbo; de aventuras
inciertas pero siempre como resultado de nuestros pasos ciertos, sea un año
maravilloso para todos, donde estemos seguros de nosotros mismos, donde
llevemos por delante la meta de nuestro desarrollo personal y donde veamos siempre una luz de optimismo y
motivación que impulse e inspire a otros a acompañarnos en ese caminar que es
nuestra vida.
Disfruten, aprovechen,
aprendan, inspiren y hagan del 2015 un año fabuloso para todos. Les deseo mucho
éxito y en el 2015 seguiremos motivando.
Luis Vicente Garcia
@lvgarciag