Para celebrar las 130.000 visitas
a este blog de motivación y actitud, quiero brevemente enfocarme en el
significado de estas dos importantes
palabras.
La motivación deriva del latín motivus o motus, que significa ‘causa del movimiento’. La motivación
puede definirse como “el señalamiento o
énfasis que se descubre en una persona hacia un determinado medio de satisfacer
una necesidad, creando o aumentando con ello el impulso necesario para que
ponga en obra ese medio o esa acción, o bien para que deje de hacerlo”.
Sin embargo lo que en estas líneas
nos ocupa se refiere a lo que otros autores han definido como “la raíz dinámica del comportamiento”;
es decir, “los factores o determinantes internos que incitan a una acción”.
La motivación por ende es un estado interno que activa, dirige y mantiene
la conducta.
Por su parte, la actitud ha sido definida como “la forma de ser del individuo” que
puede ser vista como el comportamiento que emplea un individuo para hacer las
labores. Es la realización de una intención o propósito. Según la
psicología, la actitud es “el
comportamiento habitual que se produce en diferentes circunstancias y determinan
la vida anímica de cada individuo.”. Aquí es importante recordar las
palabras de Winston Churchill:
“La ACTITUD es una pequeña cosa que hace una
gran diferencia”
Cuando unimos lo que son la motivación y la actitud con los
temas más humanos, hablamos por ende de la motivación personal (superación continua)
y la actitud positiva (con la que aprendemos de manera continua). La motivación
es el combustible que nos da energía diaria y nos enfoca en nuestras metas por
lo que es el motor que hace realidad nuestros sueños. Es por ello que debemos
trabajar en nuestro nivel de confianza y el aprecio por lo que hacemos.
Y tener una actitud positiva, nos
permite encontrar la lección o el aprendizaje de todo lo que nos sucede. La
actitud positiva nos permite pensar de manera constructiva, práctica,
objetiva y sana. Nos permite esperar siempre lo bueno de todo lo que nos
sucede, tratar de tener siempre pensamientos agradables y todo ello influye en
que transmitamos esa forma de ser a los demás.
Finalizo con una bella frase de Ralph
Marston que nos resume lo importante de tener una gran actitud positiva y una
muy fuerte motivación personal:
“Lo que haces hoy puede mejorar todos
tus mañanas.”
Seguiremos motivando con actitud positiva. Luis Vicente Garcia