martes, 15 de marzo de 2016

Re-leyendo "El Principito"

Hoy leo de nuevo el libro El Principito; mi hijo menor está terminando una tarea sobre su contenido con su bella historia. Y esto ocurre solo a dos meses en que toda la familia pudo ver la película francesa (hecha con animación en computadora) del 2015 sobre el libro del mismo nombre del año 1943, la cual fue escrita y dirigida por Mark Osborne. Película realmente fabulosa y con un enfoque diferente que nos hace pensar, soñar, viajar y conocer ese mundo particular. Sí es cierto que es una nueva visión un tanto diferente al libro y a las versiones originales de la película. Pero eso es lo que nos permite hacer la imaginación.

¿De qué se trata el libro? Pues muchos dirían que de El Principito. En realidad se trata de una historia contada por un piloto quien varado en desierto del Sahara, en una noche solitaria, tan solo a 1.000 millas de cualquier lugar civilizado, escucha una voz, la de un niño (o un príncipe) quien le pide un dibujo, el de un cordero. Una muy linda historia aunque normal dirían algunos; un cuento de niños dirían otros.  Lo vuelvo a leer, con calma y lo que para mí es una historia fascinante se vuelve en una lectura que solo termina al finalizar el libro mientras que poco a poco y sin hacerle la tarea, ayudo a mi hijo a hilar ideas y preparar sus respuestas a unas muy interesantes interrogantes.

La primera pregunta es hacer una descripción de la dedicatoria del libro, una bella y transformadora dedicatoria dirigida a un hombre solitario - quien fue niño alguna vez. Le pregunto a mi hijo: “¿tu lees las dedicatorias de los libros?”; su respuesta para mí ya es obvia: “sí papá; siempre leo las dedicatoria de los libros que leo.”

Le hago una pregunta a quienes leen estas páginas: ¿ustedes leen las dedicatorias de los libros que leen? Si somos honestos la mayoría no lo hace; bueno, la mayoría tampoco termina los libros que comienza o ni siquiera los hojea por lo que nunca se abren sus páginas que pueden inspirarnos de maneras inesperadas. Para mí las dedicatorias de los libros son parte integral del mismo pues una dedicatoria es un acto muy analizado y pensado que por supuesto si se hace bien, nunca se hará a la ligera. El análisis que hizo mi hijo fue conciso y maravilloso (bueno con la subjetividad de los ojos de un padre). La segunda pregunta: ¿cómo se relacionan el piloto con el desierto? Diluciden ustedes la respuesta a ver que se nos ocurre. Y así preguntas tras preguntas que no aceptan una respuesta fácil. Y le comento “preguntas sencillas generan respuestas muy simples mientras que preguntas más complejas nos hacen pensar.” Su respuesta aguda como siempre: “papá eso es obvio”.

Sigue la tarea y continúan las respuestas que no pueden ser respuestas cerradas sino más bien respuestas que  hay que redactar y que lo hacen pensar a uno. Y es que así debe ser la educación, una que permita racionar, pensar, dilucidar. Una que le permita a los niños y jóvenes – y permitirnos  a los que ya no lo somos tanto - hacerlo de una manera que además de ello, nos permitan como él me dijo, soñar.

Y para mí de eso se trata el libro El Principito. De soñar y viajar, de vivir en asteroides, de tener un amor tan grande como el que él tenía con su querida rosa (para él la más vanidosa pero la más bella del mundo) y de conocer sus grandes personajes imaginarios. Y como nos dice el autor Antoine de Saint-Exupéry, es un libro dedicado a su amigo de la infancia, Leon Werth, cuando era niño!

Al final del libro cuando el autor (¿o será el piloto?) dibuja el paisaje en el cual el Principito apareció por primera vez en el desierto, nos dice “Para mí, éste es el más bello y más triste paisaje del mundo.” Si es verdad que es un paisaje lleno de ilusiones, de creer en lo increíble, de escribir bellas fantasías, el de relatar nuestros sueños. Y nos pide que si viajamos por el África, “si llegáis a pasar por ahí, os ruego, no os apresuréis; esperad un momento, exactamente debajo de la estrella.” Ello lo pide con fervor de que si un niño con cabellos dorados se acerca y ríe y no responda nuestras preguntas, le avisemos pues eso significa que El Principito ha vuelto. Ese es el principito que todos llevamos por dentro; es ese niño que alguna vez fuimos.

No dejemos de ser niños y nunca dejemos de seguir soñando.

Luis Vicente Garcia

Y Seguiremos soñando e inspirando!


domingo, 6 de marzo de 2016

La Fórmula de los Equipos Ganadores del Premio Oscar


Si viste la ceremonia de los Oscars® 2016 el pasado fin de semana, te podrás haber dado cuenta que fue una noche para celebrar inclusive a aquellos que no eran los favoritos. Los mejores y más brillantes representantes de Hollywood subieron al escenario para aceptar esa pequeña  estatua de Bronce que marcó el mayor de los logros que cualquier persona puede recibir en la industria del cine!
Pero cuando escuchamos que el premio a la mejor película era para ‘SPOTLIGHT’, algo más pasó por mi mente. Sus productores no estaban solos: también subió a recibirlo parte importante de su elenco. Actores y miembros del elenco subieron para ser parte de una gran celebración. Para mi hubo una gran cantidad de ideas claves; sin embargo la más importante es la relacionada con el Trabajo en Equipo.

Y ya anteriormente le habían otorgado el premio al Mejor Director a Alejandro Iñarritú quien lo había ganado también el año pasado con la película ‘Birdman’. Y es que todos ellos tienen grandes equipos de trabajo que les ayudan a alcanzar un éxito que logra transformarse en el camino.
Todos esos grandes elencos se han dado cuenta de algo que muchos no llegan a ver

Si quieres recibir los mayores honores en cualquier industria, debes entender el “Poder del Equipo”.
Ninguna película ganadora de un Oscar® estaría completa sin los mejores efectos especiales, banda sonora, vestuario, maquillaje, guionistas, editores y escritores. Cada uno de los detalles debe estar perfectamente hecho a la medida para alcanzar los resultados ganadores que queremos ver en nuestras empresas.
Desde el año pasado Alejandro Iñarritú entendió el Poder del Equipo para formar un equipo ganador. Él supo cómo organizarlos con innovación y liderazgo.
¿Sabes si tu equipo tiene lo que necesita para ganar un Oscar®?; ¿Estas capitalizando el Poder de Tu Equipo?; ¿Cómo lo conviertes en un equipo Ganador?
Los triunfos de nuestros equipos quizás no vengan en la forma de una estatua, pero vendrán como reconocimientos de clientes satisfechos, excelentes productos y servicios, trabajo con la comunidad y una marca que genera lealtad.
¿Estás listo para crear un equipo merecedor de un Oscar?

Si lo estás, aquí tienes dos de los elementos de la Fórmula para Alcanzar el Éxito!
Puede que tengas un plan o una idea. Inclusive puedes pensar que no estás listo para implementar algo nuevo. La verdad es que todo cambio es complejo; inclusive retador. Todo lo que tienes que hacer es dar el primer paso.

Aquí tienes dos recomendaciones para hacerte merecedor de un equipo calidad Oscar® – que te ayudarán a incrementar la productividad y la rentabilidad de tu empresa:
1.  EMPODERA a todos los miembros de tu equipo y ayúdalos a crecer.
Empoderar a nuestros equipos es una de las claves para el éxito de nuestras empresas. ¿Los estamos motivando para que usen sus habilidades al máximo?

¿Estás apoyando y empoderando a tus equipos para dar lo mejor de ellos y alcanzar su potencial?
2.  ENTREGA mensajes que sean positivos  y muy motivadores.
Los mensajes deben ser poderosos y reafirmantes. ¿Sabes cómo interactuar con nuestros equipos para inspirarlos y lograr su dedicación?

Las palabras importan; los mensajes también. Utiliza palabras que te permitan crear un cambio positivo y rentable para tu empresa. Comienza hoy mismo.

Si quieres comenzar a crear un equipo ganador y merecedor de un Premio Oscar, comunícate con nosotros para lograr una estrategia ganadora a través de nuestro correo electrónico coachluis@luisvicentegarcia.com o visita las páginas www.luisvicentegarcia.com y www.coachluisvgarcia.com



Y cree que en verdad, si puedes hacer todo  lo que te propongas alcanzar!

Luis Vicente Garcia


La disciplina de correr: mente y el cuerpo para lograr el máximo rendimiento

Correr no es sólo una actividad física; es una disciplina que requiere dedicación, compromiso y un equilibrio armonioso entre mente y cuerpo...